Silvia Marsó clausura la XXXIV Semana de Cine Español de Mula

Este sábado, 6 de mayo, en el Teatro Lope de Vega de Mula, tiene lugar la gran Gala de Clausura de la XXXIV Semana de Cine Español de Mula. El evento, que estará presentado por el periodista Fran Sáez -conocido por programas como El Pinchazo-, contará con la presencia de Silvia Marsó, actriz homenajeada en esta edición. Será a las 20:30 horas y la entrada es totalmente libre hasta completar aforo

Durante la Gala de Clausura, además de homenajear a Silvia Marsó, se realizará la entrega de premios del XXIX Certamen de Cortometrajes y se proyectará el corto ganador.

La XXXIV Semana de Cine Español de Mula, celebrada del 1 al 6 de mayo en el Teatro Lope de Vega, ha contado con media docena de estrenos como las premiadas en la última edición de los Goya Cerdita y Modelo 77, así como con la proyección de una veintena de cortos finalistas del XXIX Certamen de Cortometrajes. Además, esta edición se ha caracterizado por contar con un pase matinal para que los alumnos de los centros escolares de Mula vivan el cine en la gran pantalla.

Homenaje a Silvia Marsó

La actriz Silvia Marsó, con más de cuarenta años de trayectoria profesional, ha participado en alrededor de veinte filmes de directores como Juanma Bajo Ulloa, José Luis García Sánchez, Pedro Olea o Alfonso Albacete. Entre ellos, destacan títulos como La madre muerta, Los muertos no se tocan, nene o La conspiración. En sus inicios, destacan series como Segunda enseñanza, de Pedro Marsé y Turno de oficio, de Antonio Mercer. Posteriormente, ha participado en series como El secreto de Puente Viejo, Gran Reserva: el origen o Canguros.

La labor teatral de Marsó, quien trabaja también como productora en este ámbito desde 2004, es importante a partir de los años 90, interviniendo sobre las tablas a las órdenes de Miguel Narros, Adolfo Marsillach, José Tamayo, José Luis Alonso, Alfonso Marsillach, entre otros.

Silvia Cartañá Ortega, verdadero nombre de la actriz, adoptó su apellido artístico a finales de los años 70, en el comienzo de su profesión, como homenaje al mimo francés Marcel Marceau (cuya pronunciación más aproximada sería el Marsó de su apellido artístico).