La Guardia Civil detiene al presunto autor de un siniestro vial con resultado de una persona fallecida

Se le atribuye la presunta autoría de los delitos de homicidio imprudente y conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas y drogas

Arrojó un resultado positivo de 0,50 y 0,42 mg/l de aire espirado en el etilómetro evidencial

También dio positivo en la prueba de drogas (cocaína, metanfetamina, anfetamina)

La Guardia Civil de la Región de Murcia ha detenido al conductor de un turismo en la autopista del Mediterráneo AP-7, término municipal de Los Alcázares, como presunto autor de los delitos de homicidio imprudente y contra la seguridad vial, por conducir un vehículo a motor bajo la influencia de bebidas alcohólicas y drogas.

Los hechos tuvieron lugar en la autopista AP-7, que une Crevillente (A) con Vera (AL), cuando el Centro Operativo de Tráfico (COTA) del Sector de Tráfico de la Guardia Civil de Murcia tuvo conocimiento de la ocurrencia de un siniestro vial en el que se hallaban implicados dos vehículos.

Inmediatamente se trasladó al lugar el Equipo de Atestados del Sector de Tráfico de Murcia, junto con patrullas del Destacamento de Tráfico de Cartagena y unidades de Seguridad Ciudadana de la Compañía de Torre Pacheco, donde se verificó que el accidente había consistido en una colisión por alcance entre dos turismos, produciéndose el fallecimiento de una persona, tres heridos leves y daños materiales de consideración en los vehículos implicados.

El accidente se había producido cuando el vehículo del ahora detenido, un turismo de gama alta, colisionó por alcance contra el turismo que le precedía, que circulaba correctamente, el cual salió proyectado hacia la derecha como consecuencia de la colisión y se salió de la vía, chocando contra la barrera metálica de protección y cayendo por un desnivel donde tras volcar, quedó con las ruedas hacia arriba.

El turismo alcanzado iba conducido por un varón, que resultó herido leve, y ocupado por una mujer, que resultó fallecida en el lugar del siniestro vial, mientras que el turismo que alcanzó al primero estaba ocupado por dos varones que resultaron heridos leves.

Una vez identificado el conductor que presuntamente había originado el siniestro vial, los guardias civiles observaron que presentaba síntomas evidentes de la ingesta de bebidas alcohólicas, por lo que se le practicaron las preceptivas pruebas de alcoholemia en las que arrojó un resultado positivo de 0,50 y 0,42 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, superando el doble de la tasa máxima permitida que es de 0,25 mg/litro.

Tras finalizar las pruebas de alcoholemia, el conductor también se le practicaron las preceptivas pruebas indiciarias de detección de drogas, en la que arrojó resultado positivo en cocaína, metanfetaminas, y anfetaminas.

Conforme al procedimiento establecido, al conductor le fue obtenida una muestra salival que fue remitida a un laboratorio acreditado, concertado por la Dirección General de Tráfico (DGT), para contrastar el primer resultado indiciario provisional de la presencia de drogas en el organismo, estando a la espera del resultado que será comunicado a la autoridad judicial para constancia en las diligencias incoadas, caso de confirmación del positivo.

El conductor que presuntamente originó el siniestro vial varón, de 38 años, de nacionalidad colombiana y residente en Alicante fue detenido como presunto autor de delito de homicidio imprudente y delito contra la seguridad vial, por conducir un vehículo a motor bajo la influencia de bebidas alcohólicas y drogas.

De los hechos se instruyeron diligencias por el Equipo de Atestados del Sector de Tráfico de Murcia que han sido entregadas, junto con el detenido, en el Juzgado de Instrucción de San Javier (Murcia), para la celebración del correspondiente juicio ordinario.

Los vehículos afectados, a consecuencia de los desperfectos sufridos, fueron retirados por dos grúas de auxilio en carretera. El turismo con el que se ocasionó el siniestro vial ha quedado a disposición de la autoridad judicial conocedora de los hechos como instrumento del delito.

El delito de causar la muerte de una persona por imprudencia grave utilizando un vehículo a motor o ciclomotor se encuentra recogido en el artículo 142.1 del Código Penal y puede ser castigado con penas de prisión de 1 a 4 años, y privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores durante un período de uno a seis años.

Por otro lado, el delito de conducción de un vehículo a motor bajo la influencia de bebidas alcohólicas y drogas, se encuentra recogido en el artículo 379 del Código Penal y puede ser castigado alternativamente con penas de prisión de 3 a 6 meses, multa de 6 a 12 meses, o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días y en cualquier caso con privación de derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a 1 y hasta 4 años.

La Guardia Civil sigue reiterando su mensaje a aquellos conductores que de forma imprudente y temeraria, a pesar de las campañas y advertencias de la Dirección General de Tráfico conducen después de haber bebido alcohol o tomado drogas, recordando que la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil sigue desarrollando su actividad específica de vigilancia de la seguridad vial durante las 24 horas del día, en especial en aquellas actividades de mayor riesgo, donde se practicarán las preceptivas pruebas de alcoholemia y drogas a todos los conductores que sean denunciados por la comisión de infracciones, implicación en siniestros viales o aquellos otros en que se detecte su consumo en el curso de otras actividades de vigilancia e inspección que se lleven a cabo.

Por otro lado, la Guardia Civil de la Región de Murcia quiere apelar a la conciencia cívica de la población o a otras entidades públicas, para que avisen al teléfono 062 (Guardia Civil) o 112 (Emergencias) o directamente a las patrullas en servicio, cuando se encuentran con situaciones anómalas o maniobras irregulares que den lugar a pensar que los conductores lo hacen bajo la influencia de drogas o alcohol, con la finalidad de poder adoptar las medidas policiales oportunas para que estos vehículos sean interceptados y comprobado si sus conductores se encuentran en las condiciones adecuadas para circular con garantías de seguridad, evitando el consiguiente riesgo.