Alhama de Murcia

La actual portavoz del Partido Popular de Alhama miente con descaro y busca con sus actuaciones el enfrentamiento permanente entre los vecinos/as, como única estrategia para tratar de rascar algún voto

La mala praxis de la edil Popular volvió a salir a relucir en el último Pleno a cuenta de la exposición sobre la vida y obra del artista alhameño Ramón L. Carreño, que albergó hace unas semanas la sala de exposiciones El Pósito.

Entre todas las creaciones allí expuestas, había dos imágenes que suscitaron las quejas de una cofradía del municipio. Su presidente se puso en contacto con la concejala de Cultura pidiendo que se retiraran esas obras, puesto que ellos entendían que eran inadecuadas y las consideraban “una falta de respeto a los sentimientos de la comunidad cristiana”.

La concejala de Cultura actuó en todo momento como mediadora entre las partes implicadas (familia y Cofradía), siendo la comisaria de la exposición, como responsable de la misma, quien decidió retirarlas con el único objetivo de no permitir que esta polémica manchara el buen nombre del autor y no desvirtuara el sentido de la muestra: hacer un homenaje a la vida de sufrimiento de un artista alhameño, una persona buena, en el primer aniversario de su fallecimiento.

María Cánovas (PP), que no ha aparecido por ningún acto cultural -ni se le espera- en toda esta legislatura, acudió al Pósito cámara en mano y prácticamente a escondidas, minutos antes de que la comisaria efectuara la retirada. A pesar de que el asunto se había zanjado por todas las partes, en el pasado Pleno ordinario del mes de junio supimos el motivo de aquella visita, y es que tuvo la desfachatez de sacar a colación lo sucedido en el turno de Ruegos y Preguntas, con el único propósito de hacer daño, afirmando que las imágenes no se habían retirado, cuando es algo que se hizo ese mismo día. Lo más grave es que ella lo sabía y aun así sacó el asunto y mintió.

En estos últimos días, la concejalía de Cultura ha tenido conocimiento de un acta de la Policía Local de Alhama en la que un agente emite diligencias por un supuesto delito contra los sentimientos religiosos para dar traslado a la autoridad judicial. En la misma se adjuntan las fotografías de las dos imágenes referidas.

Todo hace indicar que se trata de un nuevo intento de la portavoz Popular de perjudicar al Gobierno municipal para sacar rédito político ante la incapacidad de ésta y su falta de trabajo y de proyecto para Alhama. Ella es la mejor exponente de la antipolítica, ha perdido definitivamente el Norte y ni si quiera es capaz de encontrar su sitio en la oposición, lo que le lleva a agarrarse a cualquier clavo ardiendo, aunque con ello dañe a las instituciones o a familias de la localidad.

Alhama siempre ha sido un ejemplo de pluralidad y respeto, y no es tolerable que la actual presidenta del PP de Alhama busque permanentes enfrentamientos entre diferentes vecinos para tratar de conseguir un ápice de visibilidad.

El Ayuntamiento colabora con la cesión de los espacios públicos para fomentar la presencia de una vida cultural activa en nuestro municipio y dar la oportunidad a los artistas locales a exponer y dar a conocer sus obras a toda la población. La libertad de expresión es un derecho fundamental en una sociedad democrática y plural como la nuestra y debe prevalecer siempre que no atente contra otros derechos legítimos.